BENIDORM.- El Ayuntamiento acuerda con Abreca, Cobreca y Ociobal que el nivel sonoro de las terrazas se limite a una ambientación musical

La administración local, que controlará el cumplimiento de estos límites, recuerda que se está en un estadio inicial de desescalada y apela a la responsabilidad

Una vez acordado el horario de apertura de las terrazas de bares, restaurantes y cafeterías durante la 1ª fase de la desescalada, el Ayuntamiento de Benidorm ha abordado ahora la actividad de las mismas prestando especial atención a los niveles acústicos. El concejal de Seguridad Ciudadana y Comercio, Lorenzo Martínez, ha explicado que “tras varias reuniones con Abreca, Cobreca y Ociobal hemos establecido unos niveles de ruido permitidos en las terrazas durante su horario de apertura, que recordamos que es hasta las 23.00 horas”.

Así, y con el acuerdo de ambas asociaciones, se ha establecido que “con carácter general el nivel acústico permitido sea el equivalente a una ambientación musical”

El concejal de Seguridad Ciudadana y Comercio ha recordado que “estamos en un estadio inicial de la desescalada en el que deben primar por encima de todo la prudencia y la responsabilidad de todos: de la administración, de los empresarios y de los clientes”. “La pandemia no se ha superado y por eso son tan necesarias la prudencia y la responsabilidad, y también cumplir con las medidas preventivas”, ha recalcado.

Martínez ha señalado que “la Policía Local, al igual que hace durante todo el año, va a controlar las emisiones sonoras de las terrazas y que se cumplan los límites acordados”. Esta tarea se suma a la que también se está desarrollando de la mano de los inspectores municipales de Comercio para “comprobar que los establecimientos que han retomado la actividad están aplicando las medidas de higiene y seguridad establecidas por la Autoridad sanitaria”.

Unas medidas que en el caso de las terrazas de los establecimientos hosteleros pasan por aforos del 50% y por guardar la distancia de dos metros en la distribución de las mesas y sillas. Además, en las mesas no puede haber elementos de uso compartido como servilleteros, cartas o aceiteras.

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