OPINIÓN.- Filias y Fobias de sus señorías los concejales de Benidorm

Leopoldo Bernabeu

 

Que aquello que dicen los políticos que van hacer no se lo cree ya casi nadie, no sólo es una verdad como un templo, sino que nos lo hemos ganado a pulso entre todos. Ver como algunos de los que hoy formamos parte del sagrado salón de Plenos de la más alta institución de la ciudad, la utilizan para derramar allí toda su bilis, resulta patético y acongojante. Patético porque es muy triste el nivel al que estamos llegando. Un nivel intelectual bajísimo debido a una selección de candidatos dispuestos a arreglarnos la vida a los demás, que no pueden dar más miedo. Y acongojante porque esa misma incapacidad, unida a la ostentación de poder, se convierte en una bomba de relojería. Tiembla Benidorm.
La democracia es imperfecta y de vez en cuando, injusta. Hay personas que dedican mucho de su tiempo a preparar una buena candidatura acompañada de un trabajado programa, que al final no obtienen el respaldo que merecerían. Y hay otros que simplemente están en el sitio adecuado en el momento oportuno, y salen elegidos de la misma manera que los anteriores. Esto es, ni más ni menos, lo que sucedió en las últimas elecciones al ayuntamiento de Benidorm. Es cierto que la ciudadanía repartió sus votos entre muchos partidos en detrimento del histórico bipartidismo de siempre. Pero aquella amalgama benefició, sin duda, a los oportunistas que llegaron a última hora y que, auspiciados por un paraguas que estaba de moda, entraron en el hemiciclo de la misma forma que podía haber entrado un palo de escoba. Más vale lo malo conocido es mejor que lo bueno por conocer, dice algún refrán.
Muchos ciudadanos de Benidorm estarían encantados hoy que fueran eso, unos palos de escoba, los que hubieran entrado en vez de algún que otro edil cuyo objetivo no es más que poner en práctica sus fobias aprovechando los votos de unos ilusos votantes que seguro no esperaban algo así y que a día de hoy tienen que sentirse tremendamente avergonzados. Da igual enfrentar a asociaciones de vecinos que intentar complicar la vida a centenares de familias que se ganan la vida en los mercadillos. Da igual votar hoy a favor de los presupuestos que mañana coger por sus partes al equipo de gobierno y demostrarles quienes son los chicos fuertes del Pleno. Da igual si has intentado fichar por varias formaciones políticas diametralmente opuestas ideológicamente y has final has acabado en la última que pasaba por delante de la puerta de tu casa. Lo importante, lo estamos viendo y padeciendo, era entrar en el Ayuntamiento como fuera para poder desparramar allí todas tus miserias personales contra aquellos que no te gustan o no te pudiste cargar ostentando anteriores responsabilidades.
Lamentable propuesta la que presentó Ciudadanos para intentar complicar la vida a los cientos de mercadilleros que se ganan la vida trabajando de sol a sol miércoles y domingos en Benidorm. Mercadillos, el público de los miércoles y el privado de los domingos, que son absolutamente legales, uno de ellos incluso con varias sentencias judiciales. Personas que madrugan más que nadie, que montan y desmontan sus puestos, en clara desventaja con los elementos climatológicos, que pagan como cualquier otro por montar su mostrador, y que tienen que ver como desde la administración local llega un grupo político y exige, ni siquiera lo pide, exige que en 15 días tengas planes de auto-protección. ¡Vamos, como si hasta ese momento hubieran sido unos completos delincuentes!.
Los políticos no hemos sido elegidos para complicarle la vida a nadie. Todo lo contrario. Nos han votado para intentar hacer la vida más fácil y con menos complicaciones a nuestros convecinos. Los mercadillos de Benidorm llevan más de 40 años funcionando y nunca han tenido problema serio alguno. Menos exigir y más humildad. A la gente hay que tratarla con algo más de respeto. Las cosas se piden con educación. Todos estamos a favor de planes de seguridad y de auto-protección, pero hay muchas maneras de pedir las cosas. Depende como se haga, estamos señalando a los responsables como si fueran presuntos delincuentes, que es lo que deja entrever esta Moción. Y eso es inadmisible.
Dediquemos nuestro tiempo a arreglar muchos entuertos y desbarajustes que están pendientes de solución en nuestra ciudad y no empleemos nuestro remunerado tiempo en ir a hacer fotos que señalan a la gente como lo que no son. Vergüenza tendría que darle a más de uno que, en muchos años de Presidente de Asociación quisiera yo saber que ha hecho por defender al comercio tradicional, abandonado a su suerte mientras el sector hotelero no ha hecho más que avanzar, y sin ser capaz de afrontar con valentía problemas tan importantes como el de los retranqueos.
Menos mal que hoy, tanto los dos mercadillos de Benidorm como la Asociación de Comerciantes de la ciudad están en perfectas manos. Y esperemos que el espectáculo que cada mes dan sus señorías los concejales de Benidorm con sus fobias y sus filias, cese. Benidorm y sus vecinos no lo merecemos. Dentro de 14 meses vuelven ustedes a votarles.

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