Miguel Bou se alza un año más con la primera plaza de la ‘Heartbreak’ con un tiempo de 36’42’’ y Leire Santacreu es la primera mujer en cruzar la meta en 45’16’’
Un total de cuatrocientos nadadores, el máximo contemplado para la prueba, han recorrido la playa de Levante de Benidorm en la séptima edición de la travesía a nado más rockera de la provincia, la Travesía Heartbreak Benidorm, que organizó el Club Deportivo Finisher con la colaboración de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Benidorm.
A ritmo de los míticos The Beatles, los participantes tomaron la salida a las 9 en punto de la mañana y han surcado el mar hasta el filo de las once, cuando llegaba a la orilla la última de las nadadoras, que fue recibida entre aplausos por organizadores y público.
El edil de Deportes, Javier Jordá, no solo acompañó al Club Deportivo Finisher en la organización del evento sino que además nadó los 2.900 metros de la travesía junto a otros dos ediles del gobierno local, Ana Pellicer y Francis Muñoz, a quienes después se han unido el alcalde, Toni Pérez, y otros miembros de la Corporación en la entrega de medallas.
Clasificación
En categoría masculina, un año más, el joven Miguel Bou Bernabeu, del Vila Swim Fondistas llegó primero a la línea de meta, con un tiempo de 00:36:42; tras él alcanzaron la orilla Antonio García Rodríguez, del CA Montemar, con 00:38:03, y César Parra, del Naruralswim, con un tiempo de 00:38:25.
En lo referente a mujeres, la primera en finalizar la prueba ha sido Leire Santacreu Voigt, del CN Benissa, con un crono de 00:45:16; en segunda posición se ha clasificado Irene Pérez Cerdá, del CN Aquatic Alicante, con 00:45:43; mientras que la tercera clasificada ha sido Gema Pérez Beviá, del Aquatic, con un tiempo de 00:47:38
Los primeros nadadores locales en cruzar la meta fueron Vicente Solbes Martínez, del Gladiators Benidorm, en categoría masculina, con un tiempo de 00:41:44; y Nerea Martínez Martínez, del Unión Triatlón Benidorm, en categoría femenina, con 00:52:15.
Tras la entrega de trofeos, nadadores y organización disfrutaron de la tradicional fiesta post travesía en un afamado local de la ciudad del que toma nombre la prueba.
