Se desplazó el cuadro benidormense al pabellón del colíder de la categoría, el CFS Castalla, con apenas un cambio pero con las energías intactas a pesar de los malos resultados de los últimos partidos. Y poco o nada se podrá achacar a los 6 valientes que viajaron a pesar de lo abultado de la derrota.
Al poco de comenzar se adelantarían los locales, con una jugada con varios rechaces y quizá con algo de falta de intensidad a la hora de defender, que acabón con el atacante local remantando delante de Pepe dentro del área. Con el 1-0 y ya con casi nada que perder, los benidormenses adelantaron líneas y complicaron sobremanera a los castallenses, disponiendo de algunas ocasiones claras, como una de Héctor que tras recoger un rechace del portero y prácticamente a puerta vacía erraría lo que no suele errar. Además y como no podía faltar para no perder la costumbre, dos decisiones arbitrales pribaron al equipo de marcharse con un resultado más favorable al descanso. Primero en un penalti clarísimo por derribo del portero local a Héctor, que solo el joven colegiado no vió, y, tras señalar la quinta falta, no se atrevió a cobrar al sexta en una falta cometida sobre Ramón en la que el cierre castallense llegó tarde. Por lo tanto con 1-0 acabaría la primera parte con la sensación de que si el físico aguantaba se podría traer algo positivo.
El Castalla salió decidido en la segunda parte a marcar un gol rápido y ganar tranquilidad en el marcador, y así sería. En una acción en la que los visitantes no supieron salir de presión acabarían rifando un balón y dando un “pase al aire” en la zona central de su campo que sería un caramelo para el pivot local que pondría el 2-0. Se llevaba poco tiempo de la segunda mitad y ya se decidió jugarsela con portero-jugador, sería expulsado un jugador local por doble amarilla, y los benidormenses acortarían distancias por medio de Devesa aprovechando la inferioridad. Con 2-1 y con casi toda la segunda parte por delante. Con portero-jugador se estuvo muy espeso y tras una pérdida infantil los castallenses pondrían el 3-1 con un tiro desde su campo. Las fuerzas ya empezaron a bajar, fruto de la diferencia también de número de efectivos de un banquillo u otro. Y ya muy al final el Castalla sentenciaría y acabaria goleando hasta poner el 7-1 definitivo que fué demasiado violento y cruel para los méritos de los de la Marina Baixa. Incluso acabaría siendo expulsado Devesa fruto de la desesperación.
El domingo que viene los benidormenses disputaran un encuentro aplazado ante el Paidos Denia, a las 12:15 en el pabellón de Foietes.