SPORTING DESAMPARADOS 5
CD BENIDORM FS 3
Tras una semana sin competición por el aplazamiento del partido ante Paidos Dénia, los benidormenses se desplazaban a la cancha del Sporting Desamparados, equipo que ocupa la última plaza de la clasificación pero que llegaba al partido en muy buena línea después de 2 victorias y 1 empate consecutivos, todo lo contrario que el Benidorm que acumulaba 4 partidos sin conocer la victoria. Pero solo se pudo contar con 6 efectivos para afrontar este choque, además de las bajas por lesión de Victor, Iker y Chacón, se sumaron al carro de ausencias Pepe por un proceso gripal, Domene que se encontraba de viaje y Ortuño que debió cumplir un partido de sanción tras el nefasto arbitraje recibido en Ibi. Aun así los chicos dirigidos por Didy completaron un muy buen partido, en el que lo dejaron todo y competieron hasta el último segundo por traer algo positivo, de hecho se podría haber traído de no ser por otra errónea decisión arbitral (una más).
Comenzó el partido con los benidormenses esperando en media pista e intentando salir a las contras, para sorpresa de todos los oriolanos a pesar de la diferencia de cambios que tenía uno y otro equipo también decidieron esperar en medio campo y no salir a presionar la salida del balón benidormense. No estaba siendo un mal partido por parte visitante, de hecho se tuvo alguna ocasión en la que solo una mala decisión en el último pase o tiro les pribaba de adelantarse en el marcador. Serían los locales los que golpearían primero, en una jugada en la que el mejor jugador oriolano se jugó un aclarado por banda y remató buscando el segundo palo, con la mala suerte para los benidormenses que en el intento de despejar de Javi el balón impactaría en la cara de Diego y se introduciría en la portería en el minuto 14. A pesar del gol el guión de partido no cambió, los de la marina seguían esperando en su mitad de pista y en un robo de Héctor y una espectacular acción individual lograría poner las tablas en el minuto 19. Antes del descanso remontarían los visitantes en una acción un tanto afortunada en la que Javi sacó un corner y tras varios rechaces él mismo remataría al fondo de las mallas el 1-2 a escasos minutos de cerrar la primera parte.
Quizás los primeros minutos de la segunda mitad fueron lo peorcito del partido para el Benidorm, y de hecho en apenas tres acciones y en 5/6 minutos, los que van del 8 al 13, los oriolanos empatarían, 
remontarían y pondrían hasta el 4-2 en tres goles calcados con fallos en la marca y algun despiste defensivo y en la entrega del balón. Parecía que el bajón físico podría ser importante y las fuerzas bajarían tras pornerse 2 por debajo, pero se intentó con portero-jugador y, aunque bien es cierto que no se realizó de la mejor manera, Héctor pondría el 4-3 con aun 8 minutos por disputar. Fué entonces cuando se vió alguna acción fea por parte de algun jugador local, como una “colleja” sin sentido a Devesa por parte del dorsal 9 y el árbitro cobraría algo de protagonismo en el partido. Primero en una acción en la que expulsó claramente al entrenador del Desamparados, se vió claramente con el gesto de su brazo y se le escuchó, pero éste se negó a abandonar el área técnica y el árbitro lo dejaría en una simple amonestación, también en otras acciones como las pérdidas de tiempo del portero local, que cada vez que salía el balón lo desplazaría para alejarlo aún más con total consentimiento del árbitro. Pero la jugada polémica llegó a 3 minutos del final, en una acción de portero-jugador le llegaría el balón el Héctor al borde del área que tras chutar golpearía de manera clara en la mano de un defensor oriolano, el árbitro no decretaría la pena máxima y en apenas dos jugadas más tarde una mala entrega de Devesa le serviría en bandeja el balón a un jugador local que en el mano a mano con Ramón (que andaba de porter-jugador) no fallaría subiendo el 5-3 definitivo.
Como decimos no habrá nada que objetar a los 6 valientes que se desplazaron un sábado a las 8 de la mañana a tierras oriolanas, dieron la cara en todo momento y solo esos pocos minutos de “pájara” privaron a los benidormenses de traerse algo positivo. Otra vez será.