LA NUCIA.- Sant Rafel volvió a la Capelleta “a ritmo de traca”

La imagen de Sant Rafel ha vuelto a su ermita a ritmo de traca por las empinadas calles de La Nucía, llevado en volandas por improvisados costaleros. Cientos de personas acompañaron a Sant Rafel corriendo desde la Iglesia hasta la Capelleta. Este tradicional y peculiar acto y la posterior “mascletà” pusieron el punto y final a las Fiestas de “Santíssim Sacrament i Sant Rafel” 2017 de La Nucía, que se han desarrollado del 17 al 19 de noviembre.
La carrera de Sant Rafel (copatrón de La Nucía) a “ritmo de traca”, tras la procesión del hoy domingo es uno de los actos tradicionales más esperados por los nucieros cada año. Esta carrera de más de un kilómetro se realiza por las empinadas calles del pueblo desde la Iglesia en la plaça Major hasta la capelleta de Sant Rafel para retornar la imagen a su ermita. Esta carrera recorre las calles Llosa, Calvari, Sant Rafel y travesía de l’ermita de Sant Rafel. La imagen del arcángel es portada por improvisados costaleros de todas las edades que a “ritmo de traca” llevan en volandas a San Rafael, sorteando cintas, cuerdas y el humo de la traca aérea. Cientos de personas acompañaron corriendo a Sant Rafel detrás de la imagen hasta la ermita del santo. Incluso la reina 2017 Àngela Company y su corte de honor han acompañado la imagen del santo, corriendo por las calles de La Nucía en un frenético sprint con la “traca aérea”.
Una vez en la Capelleta de Sant Rafel se disparó la mascletá, a cargo de la pirotecnia Ricardo Caballer, con la que puso final al programa de actos de las Fiestas de “Santíssim i Sant Rafel 2017”.

Subasta de Sant Rafel
Mucho antes, a primera hora, en la Ermita de San Rafael se realizó la tradicional subasta de las andas (4) y cintas (12) del santo para la procesión posterior, que también congregó muchos vecinos en la Capelleta. Subasta que a pesar de la llegada del euro todavía se realiza en pesetas (aunque después se abone en euros) y que este año recaudó 1.163.000 pesetas (6.989,771 €). Este año el palo (anda) más caro se pagó a 300.000 pesetas (1.803,036 €) y la cinta más cara a 83.000 pesetas (498,84 €). El dinero recaudado se destina a la Parroquia para el mantenimiento de la Capelleta de Sant Rafel.

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