El concejal portavoz del gobierno del Ayuntamiento de L’Alfàs del Pi, el socialista Toni Such, ha recibido con especial satisfacción la decisión de los Juzgados “de penalizar, según se recoge en la sentencia “la mala fe de la recurrente”, a la hora de interponer el contencioso contra el Consistorio.
Contencioso “que ha supuesto unos costes a este Ayuntamiento y muchas horas de trabajo perdidas”, para después de “llenarse la boca la señora Huerta en distintos foros”, explica Such, por supuestamente desconocer la procedencia de una batería de facturas, solicitar al final del procedimiento, iniciado en agosto, su desistimiento “dejando patente su intención malsana de poner en solfa la credibilidad de las instituciones y de todos los que en ella trabajamos, repercutiendo en el trabajo diario de los empleados públicos, obligados a desviar su atención en asuntos que no han servido para nada, incido y subrayo, para nada, como ella misma ha reconocido retirando la denuncia” declara el edil.
Consideramos se ha “castigado de manera muy justa con esta nueva sentencia que acabamos de conocer, el proceder poco ético de la portavoz del PP de L’Alfàs y nos congratulamos en nombre de todos los vecinos, principales paganos de sus excesos”.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Alicante ha sido “especialmente severo” con la portavoz del PP de L’Alfàs del Pi, Maite Huerta, y su decisión de “echarse nuevamente atrás y pedir el desistimiento de otro más de los 22 recursos interpuestos por ella contra el Ayuntamiento. El Juzgado admite el desistimiento de la acción entablada, declara terminado el procedimiento y penaliza a asumir las costas causadas a la demandante “valorando en primera instancia si existe o no temeridad o mala fe, y si en su caso el recurso pudiera perder su finalidad para el que lo había instado, y ello es lo que estricta y adecuadamente ha valorado la sentencia recurrida” según informa el concejal portavoz del gobierno, el socialista Toni Such.
Un procedimiento iniciado el pasado mes de agosto, recuerda el concejal, “que ponía en tela de juicio una serie de facturas y documentación que “puedo asegurar la demandante ha tenido y tiene acceso en todo momento” detalle este último añade Such “ ha reconocido la señora Huerta reculando y formulando el desistimiento de la demanda con fecha 3 de febrero”. Algo que el Juzgado ha penalizado condenando a costas a la recurrente según recoge la sentencia “valorando en primera instancia si existe o no temeridad o mala fe, y si en su caso el recurso pudiera perder su finalidad para el que lo había instado, y ello es lo que estricta y adecuadamente ha valorado la sentencia recurrida”, habiendo decidido formular el desistimiento en fase muy avanzada del procedimiento “ello debe dar lugar a la expresa imposición de costas para la parte que ha ejercitado el desistimiento”.